
Vacunación para viajes
Tabla de contenido

Las vacunas de viaje constituyen una parte fundamental de la preparación de cualquier viaje al extranjero, especialmente a países donde ciertas enfermedades son más comunes. Antes de viajar a otro país, siempre debes consultar con tu médico o clínica de salud para viajeros qué vacunas son necesarias o recomendables para tu destino previsto.
Esta también puede ser una buena oportunidad para comprobar que estás al día con las vacunas de rutina y ponerte vacunas de refuerzo si es necesario en tu propio país. Todos los viajeros deberían vacunarse periódicamente contra la gripe estacional (que se administra una vez al año, normalmente en septiembre), y estar al día con las vacunas y los refuerzos de la COVID-19.
Otras vacunas de rutina que se recomiendan son la del sarampión, las paperas y la rubeola (SPR), el tétanos, la difteria, la tos ferina (Tdap), la varicela, la neumonía, la polio y la meningitis (especialmente importante si vas a trabajar de voluntario con niños en lugares concurridos como escuelas u orfanatos).
Si es posible, pide cita con tu médico al menos 6 u 8 semanas antes de tu fecha de salida prevista. Algunas vacunas deben administrarse con suficiente antelación para permitir que el cuerpo desarrolle inmunidad, mientras que otras requieren la aplicación de múltiples dosis repartidas a lo largo de varias semanas o meses.
Hemos recopilado las vacunas más comunes recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para viajeros internacionales por región:

África:
- Fiebre amarilla: Se requiere para entrar en algunos países, especialmente si se viaja desde un país con riesgo de transmisión de fiebre amarilla.
- Hepatitis A y B: Se recomienda debido al riesgo de consumir alimentos y agua contaminados.
- Tifus: Se recomienda para viajeros que van a zonas donde la fiebre tifoidea es común.
- Rabia: Pensada para aquellas personas que pasan largo tiempo al aire libre o en zonas rurales.
- Cólera: Puede que valga la pena ponerse esta vacuna si es probable que tengas dificultades para acceder a agua limpia o realices trabajo práctico en condiciones básicas, rodeado de una pobreza significativa.
- Meningitis: Esta vacuna es especialmente importante en regiones donde los brotes de meningitis son habituales.
- Malaria: No existe una vacuna para la malaria. El tratamiento contra la malaria se prescribe en forma de comprimidos, si es clínicamente adecuado.
Asia:
- Encefalitis japonesa: Se recomienda para viajeros que van a zonas rurales del sudeste asiático.
- Hepatitis A y B: Se recomienda por el riesgo de consumir alimentos y agua contaminados.
- Tifus: Se recomienda para viajeros que van a zonas donde la fiebre tifoidea es común.
- Rabia: Pensada para aquellas personas que pasan tiempo en zonas rurales o planifican actividades al aire libre.
- Cólera: Puede que valga la pena ponerse esta vacuna si es probable que tengas dificultades para acceder a agua limpia o realices trabajo práctico en condiciones básicas, rodeado de una pobreza significativa.
- Rabia: Pensada para aquellas personas que pasan largo tiempo al aire libre o en zonas rurales.
- Malaria: No existe una vacuna para la malaria. El tratamiento contra la malaria se prescribe en forma de comprimidos, si es clínicamente adecuado, y si viajas a una zona con alto riesgo de malaria.
Sudamérica:
- Fiebre amarilla: Se recomienda para viajeros a ciertos países, especialmente en la cuenca del Amazonas.
- Hepatitis A y B: Se recomienda por el riesgo de consumir alimentos y agua contaminados.
- Tifus: Se recomienda para viajeros que van a zonas donde la fiebre tifoidea es común.
- Rabia: Pensada para aquellas personas que pasan tiempo en zonas rurales o planifican actividades al aire libre.
- Meningitis meningocócica
- Malaria: No existe una vacuna para la malaria. El tratamiento contra la malaria se prescribe en forma de comprimidos, si es clínicamente adecuado, y si viajas a una zona con alto riesgo de malaria.
América Central y Caribe:
- Hepatitis A y B: Se recomienda por el riesgo de consumir alimentos y agua contaminados.
- Tifus: Se recomienda para viajeros que van a zonas donde la fiebre tifoidea es común.
- Rabia: Pensada para aquellas personas que pasan tiempo en zonas rurales o planifican actividades al aire libre.
- Fiebre amarilla: Es posible que a algunos viajeros se les pida un comprobante de vacunación de la fiebre amarilla, según su itinerario específico.
- Cólera: Puede que valga la pena ponerse esta vacuna si es probable que tengas dificultades para acceder a agua limpia o realices trabajo práctico en condiciones básicas, rodeado de una pobreza significativa.
Oriente Medio:
- Hepatitis A y B: Se recomienda por el riesgo de consumir alimentos y agua contaminados.
- Tifus: Se recomienda para viajeros que van a zonas donde la fiebre tifoidea es común.
- Rabia: Pensada para aquellas personas que pasan tiempo en zonas rurales o planifican actividades al aire libre.
- Fiebre amarilla: Es posible que a algunos viajeros se les pida un comprobante de vacunación de la fiebre amarilla, según su itinerario específico.
- Cólera: Puede que valga la pena ponerse esta vacuna si es probable que tengas dificultades para acceder a agua limpia o realices trabajo práctico en condiciones básicas, rodeado de una pobreza significativa.
Europa, Norteamérica y Australia:
- En general, no se requieren vacunas específicas si viajas a países del norte o centro de Europa, Norteamérica o Australia, más allá de las vacunas de rutina, a menos que viajes a zonas rurales o países específicos con brotes conocidos.
Información adicional
Para obtener más información sobre los requisitos específicos del país, consulta siempre con tu médico o clínica de salud para viajeros con suficiente antelación a tu viaje a fin de determinar qué vacunas necesitas, además de consultar con tu línea aérea, ya que es posible que esté prohibido viajar si no se está al día con las vacunas.
La Organización Mundial de la Salud subraya firmemente la importancia de las vacunas de viaje. Estas recomendaciones se basan en una amplia investigación y datos sobre los patrones de las enfermedades y la eficacia de las vacunas. Seguir sus consejos garantiza la adopción de medidas con respaldo científico para proteger tu salud y la de las personas que te rodean.